Las camas con motor son aquellas camas, o somieres, que están provistas de un motor que les permite colocarse en diversas posiciones. Esto se consigue gracias a que dichos somieres con motor poseen distintas partes móviles que se pueden mover independientemente. Accionando unas u otras alternativamente, se consigue colocar el somier en la posición deseada por el usuario.
Así, por ejemplo, podemos elevar solamente la parte inferior para mejorar la circulación de las piernas y eliminar la tensión y el cansancio en esa zona. O también podemos, por el contrario, poner más alta la parte del cabecero para incorporar el torso y así respirar mejor o, simplemente, estar en una postura más cómoda para leer o ver la televisión desde la cama con motor.
El número de posiciones en las que el somier con motor pueda colocarse dependerá del número de partes movibles de las que el mismo conste y de cómo se combinen las mismas. Generalmente las camas con motor pueden disponerse en cinco posiciones distintas, con diferentes grados de elevación de cada parte.
Es verdad que en el mercado existe la posibilidad de encontrar este tipo de somieres sin motor, en los que se puede variar la posición de forma manual, a través de manivelas. Pero también es cierto que son mucho más incómodos y mucho más difíciles para personas mayores con problemas de movilidad o con escasa fuerza.
Los motores de los somieres motorizados son eléctricos, lo que los hace ser muy silenciosos. Además, no necesitan ningún tipo de mantenimiento y su consumo de electricidad es mínimo, prácticamente inapreciable.
¿Para quiénes están indicadas las camas con motor?
Cuando pensamos en camas motorizadas lo primero que se nos viene a la mente es que son las camas ideales para personas con problemas o escasa movilidad, las personas de edad avanzada o enfermas. Y esto es totalmente cierto: para estas personas, el disponer de una cama con motor puede convertirse en una necesidad o, al menos, en algo que puede facilitarles mucho el acostarse, el levantarse y todo el tiempo que pasen en la cama.
Gracias a un fácil y cómodo mando a distancia, pueden incorporarse, facilitar el levantarse, alzar las piernas, etc., y todo ello con sólo pulsar un simple botón.
Pero además de para estas personas, la cama motorizada puede mejorar el descanso de cualquiera y hacer más placentero el tiempo que pasemos en la cama, bien sea leyendo o viendo la televisión. Adaptar la posición del somier a la postura de cada momento aliviará la presión excesiva en determinadas zonas del cuerpo, evitará que adoptemos malas posturas y, en definitiva, hará nuestro descanso más agradable.
Colchones para somieres motorizados
Sí es necesario señalar que no todos los colchones son aptos para un somier con motor. Es necesario que éste reúna una serie de características de adaptabilidad y de flexibilidad que no todos los colchones tienen. Desde ColchonesconDescuento.es le ofrecemos una amplia gama de colchones para camas motorizadas especialmente diseñados para sacarles el máximo partido.
Tipos de camas con motor
Son varios los criterios que podemos utilizar para clasificar las camas con motor. Así, por ejemplo, y en función del material con el que están fabricadas, podemos distinguir entre aquellas fabricadas en madera y los somieres con motor metálicos.
Según el tamaño podremos encontrar individuales, gemelos o para camas de matrimonio, en los que cada uno de los durmientes puede adoptar una postura distinta, independientemente uno de otro.
Los hay también con arcón -para poder almacenar en su interior- o sin él. Con la posibilidad de regular no sólo la posición, sino también la firmeza del mismo, etc.
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