El colchón es un elemento fundamental en nuestro día a día, ya que pasamos alrededor de un tercio de nuestras vidas durmiendo. Por ello debemos darle la importancia que se merece e invertir en él para disfrutar en todo momento de un equipo de descanso en perfectas condiciones. Uno de los aspectos a los que más atención hay que prestar es a la duración del colchón.
A menudo nos solemos preguntar cuánto dura un colchón y es que, en el mercado, encontraremos colchones que van desde una gama más baja a otra más alta. Los colchones de gama alta están fabricados con componentes de mayor calidad que poseerán, a su vez, mayor durabilidad.
Según ASOCAMA (La Asociación Española de la Cama), después de 10 años ningún colchón mantiene sus propiedades originales y debemos sustituirlo. El paso del tiempo conlleva un desgaste de los materiales haciendo que pueda hundirse en determinadas zonas, provocando dolores de espalda, cansancio o somnolencia que afectarán a la rutina del durmiente.
Dependiendo de la calidad del colchón, los materiales de su núcleo y su cuidado y mantenimiento durante los años, la duración del mismo puede variar.
La recomendación general sobre el plazo de renovación es de 8 a 10 años. Durante este tiempo, los componentes del colchón van perdiendo calidad, pudiendo perjudicar nuestro descanso.
Para evitarlo, debemos seguir unos consejos básicos de mantenimiento. Así lograremos que el desgaste sea más progresivo y homogéneo.
La durabilidad de un colchón dependerá de los siguientes aspectos:
La calidad del colchón
Los materiales de los que se componen nuestros equipos de descanso se deterioran con el uso y el paso de los años. Además, poco a poco también van perdiendo su confort y la calidad del descanso que obtenemos disminuye.
Debemos tener en cuenta que nuestro cuerpo también va experimentando cambios. Después de una década seguramente necesites un tipo de colchón diferente al que compraste en un primer momento.
Por otro lado, las tecnologías del descanso también van evolucionando, apareciendo nuevos materiales y tratamientos que mejoran las propiedades actuales.
Los colchones de gama alta se fabrican con materiales de mayor calidad que resisten mejor el peso y el paso del tiempo. Éstos garantizan una mayor durabilidad y mantenimiento de las condiciones iniciales con el paso de los años.
El mantenimiento
Cuando compramos un nuevo colchón debemos leer las recomendaciones que nos facilita el fabricante para su correcto mantenimiento. Así se prolongará su duración y nos aseguraremos un mejor descanso.
Por otro lado, es aconsejable que giremos y volteemos nuestro colchón cada cierto tiempo según el material del que esté fabricado.
Mantener una correcta higiene prolongará la vida de nuestro colchón. Para ello podemos aspirarlo periódicamente para eliminar ácaros y limpiarlo en caso de manchas.
Para mantenerlo en perfectas condiciones y asegurarnos que cuenta con una buena higiene, debemos protegerlo siempre con una funda o cubrecolchón.
El soporte
Si el somier o la base que tenemos se conserva en malas condiciones, provocará que el colchón pierda rápidamente sus propiedades, restándole efectividad y haciendo que se deforme con facilidad, afectando negativamente a nuestro descanso. Por ello, es importante que lo cambiemos también, ya que nuestro confort no sólo depende del colchón.
El uso de cubrecolchón
Utilizar un cubrecolchón mantendrá nuestro colchón en perfectas condiciones de limpieza.
Éste se coloca a modo de sábana bajera, lo que ayuda a protegerlo de manchas y suciedad. En el mercado también existen cubrecolchones específicos con capa impermeable para protegerlo de posibles derrames y líquidos, como el modelo PP14 de Pikolín Home. Esto resulta de gran utilidad, ya que es muy difícil limpiar un colchón una vez se moja o ensucia.
Además, los protectores de colchón pueden proporcionar una capa extra de confort, haciendo que las personas se sientan más cómodas.
Podemos encontrar cubrecolchones con distintos grosores y características. Su uso puede hacer que nuestra cama sea más blanda sin tener que gastarnos mucho dinero.
No debemos olvidarnos tampoco de las almohadas, cuyo plazo de renovación deberá ser de 2 a 5 años aproximadamente.
Cómo alargar la vida útil de nuestro colchón
Cuando compras un colchón, debes hacer lo posible por mantenerlo en óptimas condiciones durante el mayor tiempo posible.
Con un buen mantenimiento, tu colchón durará más y conseguirás un sueño de mayor calidad.
En muchos casos, el deterioro de un colchón viene determinado por su uso. Te vamos a dar algunas indicaciones que pueden alargar la vida útil de tu equipo de descanso.
- Si es posible, renueva tu equipo al completo, ya que un colchón nuevo colocado sobre un somier antiguo, se estropeará antes.
- Consulta las normas de fabricación y las recomendaciones de utilización que proporciona el fabricante.
- Voltea tu colchón cada tres meses para no generar deformaciones. En los modelos que cuentan con una sola cara, debes girarlo de la cabeza a los pies.
- Mantén tu dormitorio libre de humedades, ya que los ambientes húmedos favorecen la aparición de hongos.
- Ventila a diario las sábanas y tu habitación.
- Utiliza una base apropiada.
- Protege tu colchón con una funda o cubrecolchón.
- Limpia regularmente tu colchón: aspíralo o cepíllalo con cierta regularidad. Con ello evitarás la acumulación de células muertas, polvo o moho que pueden deteriorarlo.
¿La duración de un colchón es la misma sea cual sea su material?
Los avances en el sector del descanso han propiciado que incluso los colchones más básicos cuenten con una durabilidad satisfactoria.
Las últimas tecnologías ponen especial énfasis en que el equipo mantenga sus propiedades iniciales durante más tiempo.
Aun así, los colchones de muelles siempre se han caracterizado por su durabilidad y resistencia, mayor que la de otro tipo de colchones.
¿Si nuestro colchón se hunde hay que cambiarlo ya?
Si mantenemos correctamente nuestro colchón, su desgaste será más progresivo.
Notaremos que debemos cambiar nuestro colchón si no dormimos bien, nos levantamos con dolores y tenemos la sensación de no haber descansado durante la noche.
¿Si cambiamos de colchón, también debemos cambiar nuestro somier?
Lo más recomendable es cambiar ambos, ya que interfieren el uno en el otro.
Debemos dejarnos asesorar por los especialistas del sector para que nos recomienden la mejor opción para nosotros, en base a nuestras necesidades y al tipo de colchón que tengamos.
¿Cuándo debemos cambiar nuestro colchón?
Aunque mantengamos y protejamos correctamente nuestro colchón, el desgaste es inevitable, ya que es un producto que usamos a diario.
Con el paso de los años, todos los colchones presentan un efecto “huella” provocado por el hundimiento de la zona de descanso.
Desde colchonescondescuento.es te aconsejamos sustituir el colchón a partir de los 8 años y hasta los 10 para poder mantener un sueño de calidad.
Cómo saber cuándo cambiar nuestro colchón
ASOCAMA plantea una serie de preguntas que puedes hacerte para saber si tienes que cambiar tu colchón:
- ¿Tu colchón tiene más de 8 años?
- ¿Te levantas con dolor de cuello o espalda?
- ¿Observas que la superficie del colchón está suelta, arrugada y/o sobrante?
- ¿Sientes algún muelle o zona rígida al tumbarte en tu cama?
- ¿Escuchas ruidos en tu colchón al moverte?
- Al dormir acompañado/a, ¿os volcáis los dos hacia el centro?
- ¿Tu somier o base está inclinada o en mal estado?
- ¿Están algunas de las patas y elementos de fijación en mal estado?
- ¿Notas que tu almohada no tiene una superficie uniforme?
Si la respuesta a alguna de estas preguntas es afirmativa, debes plantearte cambiar de colchón, ya que el tuyo no te está proporcionando el descanso adecuado.
En colchonescondescuento.es contamos con una gran selección de artículos para tu descanso como cubrecolchones, fundas, sábanas, almohadas, bases tapizadas y canapés para conseguir un máximo rendimiento y durabilidad de tu colchón. No dudes en contactar con nosotros si tienes cualquier consulta o necesitas un asesoramiento personalizado.